Sinopsis: Dos libros gemelos aparecieron en Italia en la primera mitad del siglo XVI, y ambos corrieron la misma suerte. Nos referimos al Beneficio de Cristo crucificado, atribu�do a fray Benedetto de Mantua, y al Sumario de la Sagrada Escritura, de autor desconocido. Los dos tuvieron una acogida extraordinaria en los c�rculos allegados a la Reforma; fueron traducidos a varias lenguas europeas; sirvieron para alentar a los creyentes en aquellos d�as de prueba y persecuci�n; fueron condenados, perseguidos y quemados por los esbirros del Santo Oficio, a tal punto que se les crey� irremisiblemente perdidos; pero ambos reaparecieron despu�s de haber dormido por m�s de trescientos a�os en los estantes de viejas bibliotecas europeas; y ambos, ahora reimpresos, est�n llamados a efectuar en nuestros d�as, la obra a que los destinaron sus inspirados autores. La Reforma penetro en Italia poco despu�s que Lutero clavara sus noventa y cinco tesis en las puertas de la iglesia del Castillo de Wittenberg, y fue Modena la ciudad que mejor la acogi�, llegando a ser llamada la Ginebra italiana. Ciudad intelectual donde funcionaba una Academia de estudios que disfrutaba de m�s independencia y libertad que la mayor�a de las instituciones de esta �ndole en aquellos d�as, fue en este centro de la intelectualidad donde penetr� y desde donde irradi� la luz de la verdad salvadora. Nuestro libro est� identificado con Modena y su Academia, a pesar del misterio que rodea su origen. El 11 de diciembre de 1537 un predicador agustino, llamado Seraf�n, subi� al p�lpito y denunci� las doctrinas de Lutero como her�ticas y pestilenciales, afirmando que hab�an penetrado en Italia. Para confirmar su aseveraci�n mostr� desde el p�lpito un ejemplar del "Sumario", y dijo que su circulaci�n significaba un serio peligro para la fe de los habitantes. Poco tiempo despu�s otro fraile hizo la misma cosa, pero estos sermones s�lo lograron aumentar la circulaci�n del libro denunciado, de modo que sus perseguidores apelaron a Roma y consiguieron que en 1539 fu�se p�blicamente quemado en aquella ciudad. Entre sus m�s fan�ticos perseguidores figur� un eclesi�stico llamado Catarino, quien daba a entender que el libro era producto del c�lebre predicador fray Bernardino Ochino y furiosamente declaraba que tanto el libro como su autor eran merecedores de perecer en la hoguera o en "un bel fuoco" como dec�a en su idioma. La destrucci�n del libro se llevaba a cabo sin ninguna misericordia. la Inquisici�n preguntaba a los acusados de herej�a qu� libros hab�an le�do, y bastaba que mencionasen el "Beneficio" y el "Sumario" para hacerles morir por fuego, o sepultados en el mar, como se acostumbraba en Venecia. As� fue desapareciendo el libro del cual se hace menci�n por �ltima vez, en el Indice de libros prohibidos publicados en 1549 en la c�lebre ciudad del Adri�tico. Tras b�squedas afanosas fue hallado un ejemplar en Zurich del cual se hizo la reimpresi�n que apareci� en Italia, en 1877, bajo la competente direcci�n del profesor Emilio Comba. Se hall� tambi�n en Cambridge un ejemplar en ingl�s, y otro en franc�s en el Museo Brit�nico. Podemos asegurar que nadie leer� este libro, tan admirablemente escrito, sin sentir que Dios le est� hablando por medio de sus p�ginas, mostr�ndole con meridiana claridade que la salvaci�n es "por gracia, por medio de la fe" y que aquellos que tienen la seguridad de estar reconciliados con Dios deben vivir santamente en medio de una generaci�n corrompida. Lo mismo que al "Beneficio", deseamos a este su hermano gemelo, una �mplia y bendecida circulaci�n.